Esta semana hemos conocido que Hacienda ya ha concedido las primeras cien becas de 7.000 euros para opositores. Los agraciados, esta vez, han sido aspirantes a alcanzar empleo público en la Administración General del Estado. Detrás de esta medida, como telón de fondo, está la mayor oferta de empleo público de la historia; se convocó este verano, con más de 40.000 plazas. Y algo más: la necesidad de atraer talento joven a un sector público cada vez más envejecido.

7.000 euros para «sufragar gastos»…

Las becas llegan, cuenta María Jesús Montero, consejera de Hacienda y Administración Pública, «para sufragar los gastos ocasionados por la preparación de las pruebas selectivas de ingreso por el turno libre en los Cuerpos de la Administración General del Estado». La distribución es la siguiente: 43 becas para opositores al Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado; 13 para el Cuerpo Superior de Sistemas y Tecnologías de la Información de la Administración del Estado. Por último, 44 más para la escala de funcionarios de Administración local con habilitación de carácter nacional.

¿Tienes curiosidad por saber cuáles son los requisitos para acceder a estas becas? Puedes consultarlos aquí.

…Y para atraer talento joven

Hacienda, además, persigue el talento joven y, para ello, junto con las grandes ofertas de empleo público que se han convocado y se espera que se convoquen, se ponen en marcha este tipo de iniciativas. Tal y como leemos en El País, que se hace eco del informe Government at a glance 2021 de la OCDE, el 46% de empleados públicos estatales de España tiene 55 años o más. Un porcentaje que solo es superado por Italia.

España afronta una renovación acelerada de funcionarios: es una necesidad, con tantas jubilaciones inminentes, que indica que llegan años con oportunidades, de diversa índole, para el que quiera lanzarse a una plaza en la función pública. La de las becas para opositar es una muestra de las políticas que se avecinan.

Los resultados de estas iniciativas, sobre todo de las últimas grandes convocatorias, ya se ven, por ejemplo, en la bajada notable de la media de edad del sector público: los empleados menores de 35 años han crecido un 30,6% en cuatro años.

El sector docente demanda más profesores e, igualmente, un rejuvenecimiento

Esta necesidad llega, claro, al sector docente: hacen falta nuevos profesores en casi todas las comunidades, pero también hace falta que sean jóvenes: casi el 35% de los profesores y maestros españoles supera los 50 años y solo el 6,8% es menor de 30.

Según un estudio de UGT, Navarra cuenta con la plantilla más joven (un 17,6% de sus docentes tienen menos de 30 años, de un total de 45% menores de 40 años). Madrid, La Rioja y Aragón son las otras comunidades con un mayor porcentaje de menores de 30 años.

En el otro extremo, están Murcia y Galicia, con un porcentaje de docentes menor de 40 años de un 23,6% y un 24% respectivamente.

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